6 Consejos para Volver a Correr Después de las Vacaciones

Cuando te vas de vacaciones muchas veces lo que quieres es desconectar del todo. Y eso puede incluir también el hecho de dejar correr o de hacer ejercicio. Al fin y al cabo en eso consiste descansar, pero… ¿y la vuelta a la realidad?.

Exacto. Los excesos y la vida sedentaria te acabarán pasando factura y lo sabes. Aunque solo hayan sido varias semanas lo vas a notar. En este artículo voy a contarte algunos consejos para volver a correr después de un merecidísimo período de descanso. ¿Empezamos?

Consejos Útiles para Volver a Salir a Correr tras las Vacaciones

El mejor consejo de todos es que el próximo año, si no quieres que te pase lo mismo, dediques al menos un día a la semana a salir a correr, aunque estés de vacaciones. Piensa que así la vuelta no será tan dura después.

Pero si aun así quieres desconectar del todo y tus vacaciones van a durar más de 10 días, estos consejos te van a resultar muy útiles a la hora de recuperar tus marcas y volver a sentirte cómodo/a corriendo.

1. Dedica Más Tiempo al Calentamiento y a los Estiramientos.

Como tu cuerpo se ha tomado un descanso, tus músculos no estarán tan en forma como siempre. Por eso será necesario que les dediques más tiempo y los trates con mimo para que la vuelta a la rutina no sea demasiado exigente para ellos.

Dedica más tiempo del habitual a los calentamientos de antes de empezar a correr y a los estiramientos que hagas después de la carrera. Así conseguirás recuperar la flexibilidad de siempre y sobre todo, y lo más importante: evitarás la aparición de lesiones.

2. Corre Distancias Más Cortas.

No trates de seguir el mismo plan de entrenamiento de siempre. Lo mejor es que empieces poco a poco y los primeros días corras menos distancia de lo habitual. Si solías correr 10 kilómetros, empieza corriendo 3 ó 4 kilómetros y ve aumentando cada semana la distancia.

Tienes que aplicar el mismo criterio a la intensidad. Trata de llevar un ritmo suave y procura no ser demasiado exigente contigo mismo. Si te fuerzas puede que solo consigas lesionarte y retrases más todavía ese proceso de recuperación. No olvides escuchar a tu cuerpo, él te mandará señales cuando necesite que te lo tomes con calma.

3. Añade más Días de Descanso Intermedios.

Normalmente te aconsejamos que hagas días de descanso intermedios cuando sales a correr. En esta situación es esencial que los hagas. De hecho, es aconsejable que hagas más descansos intermedios.

Las dos primeras semanas lo mejor es que dejes dos días de descanso entre cada entrenamiento y después ya dejes uno. Aunque tu mente esté del todo motivada y ansiosa por seguir corriendo, debes respetar esos días de descanso. Tu cuerpo y tus músculos necesitan habituarse y asimilar poco a poco la rutina.

4. Ten Paciencia y Motívate al Máximo.

No te frustres. Seguramente te sientas un poco desanimado después de salir a correr los primeros días y ver que has perdido la forma que tenías antes de las vacaciones. Tranquilo, no es solo cuestión tuya, a todo el mundo le pasa lo mismo cuando ha estado un período de tiempo inactivo.

Para volver a recuperarte tendrás que hacer acopio de motivación y paciencia. En menos de lo que crees volverás al estado de forma que tenías antes de las vacaciones. ¿Cuánto tardarás? Pues eso depende, puede que sea un mes o dos, o incluso más. Lo importante es que no pretendas recuperarte demasiado deprisa.

5. Practica el Entrenamiento Cruzado.

Si además de volver descansado te has traído un par de kilos de más contigo vas a tener que esforzarte un poco más. Es posible que en lugar de salir sólo a correr, necesites dedicarle tiempo a otro deporte que te ayude a recuperar la forma, como el ciclismo o la natación.

Combinar tus entrenamientos con la práctica de otros deportes y seguir una dieta saludable puede ser tu mejor opción. Te ayudará a recuperar tu peso más rápidamente y a mejorar tu capacidad cardiorrespiratoria.

6. Recupera la Fuerza Perdida del Tren Inferior.

Si quieres acelerar el proceso de recuperación de tu forma física lo mejor es que dediques uno o dos días a la semana al entrenamiento de fuerza. En concreto, deberás potenciar el tren inferior y volver a fortalecerlo al máximo.

Al principio empieza suave y ve subiendo la intensidad progresivamente. Trabaja especialmente la fuerza en tobillos, rodillas, abdominales y lumbares. Así, además de ganar fuerza estarás reduciendo la probabilidad de sufrir una lesión.

Crea tu Propio Plan de Vuelta a la Rutina

Para poder diseñar tu propio plan de entrenamiento de vuelta a la rutina, tendrás que tener varios factores en cuenta, como pueden ser:

  • La duración de tus vacaciones (es decir, el período total de inactividad).
  • La edad que tengas.
  • El estado físico que tenías antes de las vacaciones.
  • Tu nivel de experiencia como corredor.

Piensa que cuanto más tiempo hayas estado de vacaciones más cauteloso deberás ser a la hora de volver a los entrenamientos. Recuerda que debes darle tiempo a tus músculos, huesos, ligamentos y tendones para que se adapten de nuevo a tu rutina de trabajo.

Si has estado 3 meses inactivo, por ejemplo, tendrás que empezar haciendo tiradas más cortas y dejando más días de descanso entre salida y salida. También deberás subir la intensidad y la frecuencia de entrenamientos con mucha más calma que si solo has estado un mes.

Debes combinar los entrenamientos suaves con descansos prolongados, el entrenamiento de fuerza para fortalecer el tren inferior y el entrenamiento cruzado para recuperar la forma y bajar algún kilito de más. Esta sería la fórmula para volver a ponerte en forma y recuperar tu ritmo lo antes posible.

¡Verás que rápido recuperas tu ritmo!

Todos nos merecemos un descanso, así que no te sientas culpable. A partir de un mes o dos todo volverá a la normalidad y podrás empezar a seguir planes de entrenamiento más avanzados o incluso prepararte para una competición.

Como ya sabes, lo más importante será que escuches atentamente las señales que te manda tu cuerpo para saber si estás haciendo bien las cosas o necesitas ir más despacio para no sufrir dolores innecesarios o lesionarte.

Es esencial que no te desanimes ni te des por vencido, con paciencia y motivación conseguirás ser el mismo deportista de siempre. Así que ¡a por ello!