Crea tu Propio Diario de Entrenamiento

Seguro que más de una vez has oído hablar de los diarios de entrenamiento y sus múltiples ventajas para los corredores. Pero, ¿sabes para qué sirve y qué datos son realmente importantes registrar?

En este artículo te ayudaré a crear tu propio diario de entrenamiento y conocer sus ventajas, además de conocer para qué sirve acumular los datos de cada uno de los entrenamientos que haces. ¿Empezamos?

¿Qué es un Diario de Entrenamiento?

Primero vamos a definir el concepto: un diario de entrenamiento es un documento escrito en papel o en formato digital que sirve como instrumento de registro de tu actividad diaria deportiva.

En el running, el objetivo fundamental es el de analizar y determinar tu progreso como corredor y tu evolución en el tiempo. No debes confundirlo con tu plan de entrenamiento. El diario solo registra los resultados del plan que sigues.

Como ya te he comentado antes, el formato del diario puede ser en papel o digital. Aunque hay quien puede preferir seguir apuntando sus progresos en una libreta, el formato clásico no ofrece las mismas comodidades que las que te pueden dar las nuevas tecnologías.

Si escoges tu móvil, tu ordenador o la nube para registrar tus datos, podrás acceder a ellos en todo momento. No es necesario que uses aplicaciones demasiado complicadas o de pago, con que pruebes a escribir tus datos en Google Drive, Google Sheets, Google Fit o Evernote, será suficiente.

¿Qué Datos Recoge un Diario de Entrenamiento?

En realidad, tú eres el que decide cuántos datos quiere incluir en el registro diario de tus avances. Como consejo te diré que tampoco te extiendas demasiado en tus anotaciones.

Los datos de un día no deberían ocupar más de lo que podría caber en una nota adhesiva amarilla. Si de por sí puede dar pereza apuntar los datos, si es demasiada información, aún tendrás menos ganas.

Aunque te voy a dar un listado de datos relevantes para incluir en un diario de entrenamiento, es conveniente que elijas los que tu consideres esenciales para ti y personalices tu propio diario. Eso sí, ¡no olvides empezar con la fecha y la hora!

1. Tipo de Entrenamiento

Es importante que determines qué tipo de entrenamiento has realizado en cada una de tus salidas. No es lo mismo salir a correr a ritmo lento que a ritmo rápido ni entrenar en cuestas o en intervalos. Si realizas un entrenamiento de fuerza o un entrenamiento cruzado, también es interesante que lo registres.

2. Duración del Entrenamiento

Otro dato relevante siempre será la duración total de tu entrenamiento. Anota la hora a la que empezaste y a la que acabaste. Si es carrera, apunta también la distancia recorrida en kilómetros durante ese tiempo de entrenamiento. Así podrás ver cómo vas mejorando tus marcas.

3. Itinerario del Entrenamiento

Es importante registrar qué ruta has seguido en cada entrenamiento. Piensa que según el camino que sigas te encontrarás unas u otras dificultades o tipos de terreno. Este puede ser un factor importante que altere los resultados que obtengas en cada salida. Si se trata de rutas personalizadas que has creado tú, puedes bautizarlos con nombres inventados como ‘el parque de las cuestas’ o ‘la alameda’.

4. Zapatillas utilizadas

Las zapatillas son el elemento más importante en la equipación de un corredor, y desgraciadamente, nada dura para siempre.

Una de las maneras de saber si debes pensar en cambiar tus zapatillas es saber cuantos kilómetros llevan acumulados, ya que con el uso las zapatillas van perdiendo algunas de sus propiedades, y esa degradación puede no ser tan evidente a simple vista. Más allá del aspecto de desgaste que puedan mostrar en la suela o en la propia estructura de la zapatilla, los kilómetros acumulados te dirán hasta que punto mantienen o no sus propiedades de amortiguación originales. Por eso, saber qué distancia has recorrido con tus zapatillas te ayudará a decidir ese cambio, y apuntarlo en el diario de entrenamiento te resultará especialmente útil si dispones de varios pares de zapatillas y las vas alternando a la hora de entrenar.

5. Datos Meteorológicos

No está de más que registres información sobre el estado del tiempo mientras estabas entrenando. Datos como la temperatura, la humedad o la velocidad del viento, incluso si estaba nublado, hacía sol o llovía, son factores que pueden influir en tu rendimiento y motivación.

6. Datos Físicos

Ahora solo nos quedan datos sobre ti. Cuando hablamos de datos físicos nos referimos a que anotes, por ejemplo, tu ritmo cardíaco si dispones de pulsómetro o posibles molestias musculares. Para evitar futuras lesiones, recuerda y anota si has sufrido algún dolor durante el entrenamiento. Si eres mujer, también es aconsejable que escribas el estado de tu ciclo menstrual.

7. Datos Psicológicos

Por último, puede ser interesante registrar tu estado emocional. ¿Cómo te sentías antes, durante y después de entrenar?. ¿Estabas motivado, ansioso, aburrido?. Puede ser interesante de cara a valorar resultados, y te puede sorprender cómo puede influir tu estado de ánimo en tus resultados. Además, debes de tener en cuenta el factor psicológico a la hora de valorar tu evolución. Si corres en compañía también puedes apuntar quién fue tu compañero de entrenamiento en cada ocasión.

¿Qué Ventajas Supone Tener un Diario de Entrenamiento?

Te preguntarás que para qué sirve apuntar todos estos datos. Pues bien, a medida que vayas registrando poco a poco todos los datos de tus entrenamientos, puedes ir haciendo balances semanales, mensuales e incluso anuales. Si sumas por ejemplo los kilómetros que haces en un mes y comparas los datos con los del mes anterior puedes ver cómo vas progresando.

Si uno de tus objetivos es adelgazar, puedes llevar un control de tu peso de forma semanal, quincenal o mensual. Así te resultará fácil determinar qué tipo de entrenamiento te resulta más efectivo para combinar con tu dieta.

Tener un diario de entrenamiento supone muchas ventajas, pero sobre todo te ayudará a hacer visible y real tu esfuerzo. Podrás apreciar cómo empezaste y hasta dónde has sido capaz de llegar con persistencia.

Además de poder ver tu evolución como corredor, esa información te resultará útil para prevenir lesiones y corregir algunos errores que puedas estar cometiendo a la hora de ser fiel a un plan de entrenamiento que te hayas fijado.

Lo más importante es que un diario te ayudará a mejorar como deportista y a sentirte motivado en todo momento. Si te relajas demasiado, te servirá de motivación para ponerte las pilas y si por el contrario, estás entrenando demasiado, te ayudará a darte cuenta a tiempo y podrás relajarte un poquito antes de lesionarte, por ejemplo.

Ayudándote de la tecnología en tu Diario de Entrenamiento

Al principio del artículo he dicho que podías llevar tu diario en papel o en formato digital, y es cierto. Pero también habrás visto que es mucha la información a recoger si quieres llevar un control exhaustivo de tu actividad, y por eso, es aquí donde la tecnología juega un papel fundamental.

Si sales a correr con tu teléfono móvil o, mejor aún, si dispones de un pulsómetro con GPS, y utilizas alguna de las aplicaciones online disponibles para registrar tus entrenamientos, muchos de estos datos quedarán registrados de forma automática en tu diario de entrenamiento, por lo que registrando manualmente algunos de los conceptos que hemos descrito, dispondrás de una gran cantidad de información de forma automática en tu diario.

Por ejemplo, yo utilizo un pulsómetro con GPS y bluetooth en el que registro mi actividad cuando salgo a correr, y el fabricante cuenta con una aplicación online que, instalada en mi teléfono móvil, se conecta al pulsómetro de forma automática cada vez que guardo en él una actividad y registra esos datos. Aunque podría usar la aplicación del fabricante del GPS, tengo conectada mi cuenta con la de otra aplicación que se sincroniza de forma automática con la aplicación del fabricante y comparte los datos.

Cuando llego a casa después de correr y cojo el teléfono móvil, mi pulsómetro pasa los datos a las aplicaciones recogiendo información de mi salida como la hora de inicio y fin, el recorrido que he llevado, la velocidad y el ritmo cardiaco en cada punto del recorrido. Las aplicaciones cruzan los datos de posición con mapas online y me muestran gráficamente el recorrido sobre el mapa y la inclinación del terreno en cada punto. Con los datos de ubicación y hora consultan también la climatología de la zona. Y como me permiten registrar el equipo que llevaba, y por tanto, con qué zapatillas he salido, calculan automáticamente los kilómetros que llevan acumulados.

Así que, de forma automática, recojo un montón de información y solo tengo que completarla diciéndole qué tipo de entrenamiento he realizado y como me he sentido.

Querido Diario de Entrenamiento…

Sea como sea el formato de diario que elijas y los datos que quieras registrar, no olvides ser escueto y directo con tus anotaciones. No necesitas escribir una novela cada vez que vuelvas de un entrenamiento.

Cuanto más sencillo y rápido te resulte completar tu diario, menos pereza te dará escribir unas cuantas palabras cada día. Piensa que no siempre tendrás tiempo que dedicar al registro de tus progresos, por lo que es preferible que vayas al grano.

Valdrá la pena perder dos minutos más cada día para ver después tu evolución como deportista. Los datos no mienten, así que deja constancia de todo para que tu crecimiento como corredor sea una realidad para ti. ¡No esperes más y lleva tu propio diario de entrenamiento si no lo haces ya!.